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Gastronomía Romagnola: La delicia de la bella Italia

Una cocina para todo el mundo

Cuando hablamos del conjunto de las cocinas mediterráneas la comida italiana es una de las mundialmente conocidas desde hace ya varios siglos y una de las más apreciadas y estimadas del planeta, con millones de personas que consumen pizzas y pasta alrededor del mundo, pero la comida italiana que se conoce fuera es solo una versión parcial de una gastronomía que es muy variada y distinta de región a región.

Algunos de los ingredientes más conocidos de la gastronomía italiana son el queso parmigiano reggiano, el vinagre balsámico de Módena, la mortadela di Bologna o el prosciutto di Parma en Emilia – Romagna, el queso gorgonzola de Piamonte y Lombardía o la trufa blanca de Alba.

Los platos italianos son de fácil digestión y de preparación sencilla. La única condición que se necesita de los ingredientes es que sean frescos: los tomates, los ajos, las cebollas, las berenjenas y el resto de verduras. El arroz y el maíz forman parte de los alimentos básicos más importantes de muchos países, así como el pollo y el cerdo son algunos de los animales que más provecho se les saca en diferentes lugares. Todos ellos son productos fundamentales de la cocina italiana.

Italia presenta varias particularidades regionales que representan una riqueza gastronómica: comparada con el resto de las cocinas mediterráneas, siendo la italiana la más variada. Dependiendo de la región y el clima, la cocina, los ingredientes y los platillos serán distintos, son platos sustanciosos, consistentes y ricos en calorías.

Los platos de la cocina de Emilia Romaña, son sin duda alguna, los más sustanciosos y variados de todas las cocinas italianas. En ella destaca la pasta, el finísmo aceto balsámico tradicional, el cual es envejecido de 12 a 25 años en barricas de diferentes tamaños, el prosciutto de Parma y el jamón crudo de reconocida fama internacional. Su cocina es muy modesta y se basa en productos agrícolas y mariscos, creando platillos tan tradicionales para la región, como lasaña, pasta con relleno y tortellini.

Algo que acompaña todos los platos de pasta el parmigiano reggiano, es el queso duro que no puede faltar, solo está ausente cuando hay de por medio crustáceos y pescado. En esta región se producen una gran cantidad de diferentes tipos de queso; Grana, Padano, Provolone Valpadana, Casatella y Caciotta, siendo los principales tipos de quesos que se pueden degustar.

La cocina de Emilia – Romagna ofrece una gran variedad de platos de pasta, inclusive esta región se haya delimitada por una frontera imaginaria en la preparación de la pasta que difiere del resto de Italia. Se preparan fundamentalmente pasta de harina de trigo y huevo, en tanto que más al sur, y también en Toscana, se utiliza una gran variedad de trigo duro que se mezcla con agua.

Una de las mejores formas de conocer una cultura es a través de su comida, la cual guarda años de tradiciones con estilos diferentes, siendo la región de Emilia – Romagna la principal representante de la gastronomía italiana.

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